Olimerca.- Hace unos años se planteó  conseguir una nueva etiqueta de calidad para los aceites de Jaén, ¿qué diferencia la nueva IGP del proyecto pasado?
Manuel Parras.- Bueno, el anterior proyecto consistía en la DOP Campiña de Jaén y en la DOP Sierra Sur. Estos proyectos no tuvieron el reconocimiento de la Comisión Europea y fue a raíz de este momento, cuando en el año 2010 se impulsa la IGP Aceite de Jaén. Entonces se trataba de conseguir dos DOPs que cubrieran todo el territorio provincial, junto con las reconocidas DOP Sierra de Segura, Sierra de Cazorla y Sierra Mágina. Después, se apostó por una IGP que cubriera todo el territorio provincial que es lo que se ha conseguido.

Olimerca.- ¿Es necesario una nueva IGP cuando en la provincia ya hay tres DOP?
Manuel Parras.- Obviamente sí, porque así lo decidieron las tres DOP que estuvieron en el proyecto al inicio. Yo me incorporé mucho más tarde, en mayo de 2017. Tenemos tres excelentes DOP que hacen muy bien su trabajo, pero ninguna lleva el nombre “Jaén” que es muy relevante y tiene reputación. Además, en Jaén, fuera de los territorios amparados por las DOP, se hacen excelentes vírgenes extra que también tienen derecho a portar un marchamo de calidad diferenciada.
Las DOP y la IGP no han de competir sino de ser complementarias. Creo, sinceramente, que un productor que porte dos contraetiquetas, una de una DOP y otra con IGP, va a tener un mayor reconocimiento en el mercado. Hemos de cohabitar y lo haremos inteligentemente.
Por eso animo a los olivareros, almazareros, envasadores y comercializadores que formen parte del proyecto que dará más valor al aceite virgen extra de Jaén.

Olimerca.- ¿Cuál es su hoja de ruta a partir de ahora?
Manuel Parras.- Conformar el Consejo Regulador provisional, adherirnos a la Fundación Certióleo, donde están las tres DOPs, incorporar un secretario o secretaria del Consejo Regulador y, en unos meses, convocar elecciones. Considero que, dentro de un año, como máximo estaremos a pleno rendimiento.

Olimerca.- ¿Cuáles son sus objetivos a corto y medio plazo?
Manuel Parras.- Bueno, nuestro objetivo ha de ser certificar aceites la próxima campaña. No obstante, hay que esperar a que ningún país de la UE, a excepción de España, interponga algún recurso o alegación al Documento Único publicado recientemente.

Olimerca.- ¿Con qué ayudas contarán para su puesta en marcha?
Manuel Parras.- Este es un proyecto que tiene que autofinanciarse, si no mal asunto. No obstante, hemos tenido hasta ahora ayuda de la Diputación Provincial de Jaén. La Junta de Andalucía nos va a ceder unas instalaciones en GEOLIT y, por otro lado, concurriremos a las ayudas de la Junta de Andalucía y de otros organismos. Pero este proyecto ha de autofinanciarse. Son los productores los que han de pagar por que sus aceites sean certificados. Mal lo haríamos si solo confiáramos en las ayudas públicas.


La IGP Aceite de Jaén y su repercusión en la provincia
En opinión de Manuel Parras, la nueva IGP Aceite de Jaén va a ser muy importante porque, en España, si alguien pregunta a un ciudadano de cualquier lugar con qué producto vincula la provincia de Jaén, sin duda lo hará con el aceite de oliva. Ahora tendremos una “signo” o identificación de la Unión Europea que acredita que el “Aceite de Jaén” cumple los estándares rigurosos necesarios para llevar este marchamo de calidad. No debemos olvidar que es un elemento de diferenciación de la oferta.

Además, si aglutinamos recursos, podremos posicionar el Aceite de Jaén como un aceite de oliva virgen extra de calidad en los mercados exteriores. Pero para ello, necesitamos remunerar la calidad y sobre todo el esfuerzo de los productores; y a largo plazo, hemos de conseguir una disposición del consumidor a pagar más por estos productos, como ocurre con las DOP. Si no lo conseguimos, nos habremos quedado en mitad del camino.