Olimerca.- El precio del aceite de oliva virgen extra en Italia ha alcanzado los 9 euros la botella y uno de cada tres consumidores ya no lo compra tanto como antes, así lo revela una encuesta realizada por el Instituto Piepoli.

Según los autores de la investigación, el aumento del precio de 4 a 9 euros por botella ha cambiado los hábitos de compra de alrededor del 30% de los consumidores. En concreto, el 47% de los entrevistados dice haber reducido el consumo en un 30% y el 40% dice haberlo reducido a la mitad. 

En términos más generales, el 45% de la muestra afirma haber cambiado sus hábitos culinarios al pasar al aceite de semillas más barato: muchos sólo para cocinar, algunos también para condimentar, según publica el portal www.ilsole24ore.com.

Los consumidores están cada vez más atentos a la variable del precio: frente a los 3 o 4 euros por botella que se ofrecían en los últimos años, son conscientes de que ya no pueden pagar un precio tan bajo

Según el Instituto Piepoli, esta fuga del aceite de oliva tendrá consecuencias duraderas y podría conducir a una reducción estable del consumo de hasta el 40%. Según la directora del Instituto, Sara Merigo, “el aceite de oliva siempre ha sido un producto ampliamente consumido por los ciudadanos y su reducción, por un lado, combinada con la transformación de hábitos, por el otro, tendrán un impacto a largo plazo para el sector". 

En definitiva, los consumidores están cada vez más atentos a la variable del precio: frente a los 3 o 4 euros por botella que se ofrecían en los últimos años, son conscientes de que ya no pueden pagar un precio tan bajo. Pero cuando se les preguntó cuál debería ser el coste justo de una buena botella de aceite de oliva virgen extra made in Italy, la mitad de los entrevistados respondió 7 euros.

La reacción de los productores 
Sin embargo, los productores no están totalmente de acuerdo con estas cifras. “Las encuestas por muestreo son respuestas instintivas que tienen en cuenta los estados de ánimo - afirma Zefferino Monini, director general de la almazara del mismo nombre - los datos de Nielsen, que siguen las compras reales, muestran una caída, pero más limitada. Para 2023, las ventas de aceite de oliva virgen extra en la gran distribución disminuyeron un 9,5% y la media de los meses de enero y febrero de 2024 indica una caída de volúmenes en torno al 7,8%”. 

Sin embargo, no se debe ignorar el punto de vista de los consumidores, “porque indica una intención de compra para el futuro, y este futuro no parece halagüeño”, añade. 

Todas las miradas están puestas en el precio. Según Monini “el mercado empezó a inflar los precios cuando se empezó a entender que la campaña oleícola iba mal, para el futuro, mucho dependerá de cómo vaya la próxima cosecha. La primavera parece prometedora en términos de precipitaciones. Si todo va bien y la próxima campaña oleícola es satisfactoria no sólo en Italia, podemos esperar una caída de los precios en 2025 hasta unos 6 euros por botella".