Olimerca.- El sector oleícola vive un momento de transformación. A las oscilaciones del mercado, la caída del consumo en determinados países y las tensiones comerciales internacionales, se suman fenómenos como la inflación, los aranceles impuestos por Donald Trump y el encarecimiento logístico, que impactan directamente en los costes de producción y distribución.  

Ante esta situación, las marcas oleícolas tienen hoy más que nunca la oportunidad de destacar si toman decisiones inteligentes y estratégicas. Muchas de ellas se preguntarán cómo podrían mantener la relevancia y la rentabilidad en tiempos de tanta incertidumbre.  

Las respuestas a sus dudas las tiene Kantar España, entidad para la que existen múltiples acciones que las marcas pueden desarrollar para sortear con éxito la crisis arancelaria y es su responsabilidad actuar como faros de seguridad, fiabilidad y confianza para los consumidores. 

Consejos para reforzar la marca 

Desde el punto de vista del marketing estratégico, este tipo de crisis no es solo una amenaza, sino que representa una oportunidad para reforzar la marca, afianzar relaciones con el consumidor y explorar nuevos caminos de diferenciación y crecimiento.  

El Managing Director de Kantar España, Guillermo Belenchón, recopila las cinco claves para reforzar la marca: 

1º: Reevalúa tu competencia y tu posicionamiento. Comprende contra qué estás compitiendo realmente. Si los productos básicos cuestan más, tu marca podría convertirse en un gasto discrecional. Si los PVP suben afectados por el aumento de costes o aranceles, tu AOVE puede pasar de ser una elección habitual a un "lujo ocasional" para algunos consumidores. ¿Compites con otras marcas de calidad o con marcas blancas? ¿Con aceites importados o con productores locales? Comprender quién ocupa el lugar que tú quieres en la mente del consumidor es el primer paso para ajustar tu propuesta de valor. 

2º: No desaparezcas, invierte en tu marca. Kantar considera que dejar de anunciarse o, incluso, reducir a la mitad la inversión publicitaria es perjudicial a largo plazo, pues el awareness base y las ventas se verán afectados y la recuperación requerirá de mucho más tiempo (e inversión). En tiempos difíciles, algunas empresas recortan en marketing. Esto es un error, pues los estudios demuestran que las marcas que mantienen o, incluso, aumentan su visibilidad durante las crisis salen reforzadas cuando el mercado se estabiliza. Recuerda que la gente compra tanto con el corazón como con la cabeza. Si tu AOVE representa calidad, tradición, salud o sostenibilidad, ¡cuéntalo! Ese mensaje puede calar en la mentalidad del consumidor y ayudar en la toma de decisiones.

3º: Antes de bajar los precios, comprueba tu Pricing Power. No ooptes por bajar los precios antes de valorar tu capacidad para mantenerlos. ¿Sabes cuánto están dispuestos tus clientes a pagar por tu aceite de oliva? ¿Te cambiarían fácilmente por otro más barato? Esa capacidad de defender tu precio, incluso cuando el mercado aprieta, se llama Pricing Power, y es lo que diferencia a las marcas fuertes de las vulnerables. Las promociones puntuales pueden ser útiles, pero no conviene abusar de ellas porque acabarás devaluando tu producto. Recuerda: ¡Cuanto mayor sea tu Pricing Power menos dispuesto estará el consumidor a cambiarte por una alternativa más económica, incluso en el segmento premium del mercado!  

4º: Revisa tu propuesta de valor a través de tus mensajes. ¿Tu AOVE proviene de una variedad autóctona? ¿Se obtiene empleando prácticas sostenibles? ¿Procede de olivar tradicional? ¿Tu producto alberga una bonita historia familiar? En un mercado saturado de etiquetas, la claridad y autenticidad del mensaje marcan la diferencia. Si la competencia empieza a perder credibilidad, tu marca puede destacar simplemente por seguir siendo honesta y coherente con sus valores. 

5º: Encuentra nuevos espacios. Quizás tu marca aún no se comercializa en mercados donde podría tener éxito o necesita una actualizarse lanzando una edición especial de tu producto (ecológica, monovarietal, selección de campaña…). La innovación y la segmentación serán tus aliadas. Analiza detenidamente tu marca, tu mercado y tu público y, sobre todo, pregúntate cómo puedes hacer esto de forma diferente. Lo que es evidente es que debes buscar nuevos mercados o targets donde puedas ser más competitivo.  

El contexto no es fácil para nadie. Las marcas oleícolas que se mantengan activas, que escuchen al mercado y que actúen con inteligencia saldrán reforzadas porque el consumidor seguirá valorando la calidad, la autenticidad y la cercanía. La clave ahora es seguir presente, ser relevante y, sobre todo, no tener miedo al cambio.  

¿Es hora de exportar más? ¿Debemos destacar el origen local? ¿Hemos de crear una línea más premium o más accesible? Cada marca tendrá su respuesta, pero todas necesitarán la misma herramienta: ¡Una estrategia sólida basada en datos y visión de futuro! 

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