Olimerca.- La red de productores franceses Oil'Ive Green se ha marcado un objetivo: reactivar la producción de aceite de oliva a través de la energía agrivoltaica. Ésta consiste en aprovechar una misma superficie de terreno tanto para obtener energía solar como productos agrícolas. Es decir, los paneles solares conviven con los cultivos sobre la misma superficie.

Para ello, pretenden plantar 50.000 hectáreas de olivos en la próxima década, y como este cultivo se está viendo afectado por el cambio climático, la compañía ha firmado una colaboración con la firma española Iberdrola, con el fin de proteger las explotaciones agrícolas de los riesgos climáticos y del calentamiento global, tal y como publica el medio francés PV-Magazine.

En concreto, los dos actores identificarán las explotaciones que puedan acoger proyectos agrivoltaicos en Nueva Aquitania, Auvernia-Ródano-Alpes, Provenza-Alpes-Costa Azul y Occitania. Las centrales agrivoltaicas montadas sobre paneles solares se adaptarán posteriormente específicamente al cultivo del olivo en seto, en superficies agrícolas de varias decenas de hectáreas.

“El apoyo técnico y agronómico frente al cambio climático, la ganancia de productividad y la economía generada por la planta agrivoltaica permitirán a los operadores desarrollarse, perpetuar su actividad y a aquellos que deseen diversificarse hacia el cultivo del olivo, financiar y facilitar su reconversión”, asegura Thierry Vergnaud, director de desarrollo de la filial de suelo de Iberdrola Francia.

Según Iberdrola, la gestión de setos frutales asociada al agrivoltaismo debería promover beneficios agronómicos mediante la protección física de los árboles contra los riesgos climáticos (granizo, heladas tardías, quemaduras de hojas, etc.). Los paneles fotovoltaicos también evitarán la desecación del suelo manteniendo un nivel de humedad suficiente para los cultivos, sin tener que recurrir al riego.