Olimerca.- Acesur ha sustituido el consumo de gas natural por biomasa del olivar, como fuente de energía térmica en sus procesos. Lo ha hecho en su planta de Tarancón (Cuenca), cuya actividad es la molturación y extracción de aceites procedentes de semillas oleaginosas, principalmente girasol en sus dos variedades Linoleico y Alto-oleico. 

El pasado mes de mayo puso en funcionamiento una caldera de producción de vapor que usa como energía primaria ese combustible, de modo que ha eliminado el uso de fuentes de alimentación energética no renovables.

La puesta en marcha de esta caldera ha supuesto una inversión cercana a los 2,73 millones de euros, además de un nuevo hito para Acesur en su hoja de ruta hacia la descarbonización, con una estimación de reducción de emisiones de gases efecto invernadero en 6.931 ton.CO2eq/año.

Además, se redunda en la economía circular del proceso, ya que la caldera se alimenta con biomasa, que es un subproducto que se consigue en el proceso de obtención del aceite de oliva y que Acesur valoriza en otros de sus centros de trabajo

Acesur ha contado con Sincal como socio en la puesta en marcha de la caldera de biomasa, con una potencia de 7,11 MW para producir vapor sustituyendo el consumo de 23.659 MWh/año de energía fósil (gas natural) por energía verde, como es la generada mediante el uso de energía renovable. Acesur ya opera de forma exitosa con caldera de biomasa en el centro industrial de Vilches (Jaén).

Inauguración
La puesta en marcha de la actividad de la caldera se ha conmemorado con un evento en el que  ha estado presente el alcalde de Tarancón, José Manuel López Carrizo, la primera teniente alcalde y concejal de Promoción Económica, Riánsares López Cortés, la diputada provincial responsable de la comarca de Tarancón, y de las áreas de Servicios Sociales e Igualdad, Eva García-Marquina, la directora financiera de Sincal, María Luisa Platero Cazorla, y Antonio Béjar, director comercial de la compañía anteriormente citada.

En palabras de Alfonso López, director industrial de Acesur: “La caldera de biomasa ha arrancado de forma inmejorable, cumpliendo los objetivos marcados de descarbonización y haciendo de Tarancón un centro de trabajo con una operativa más sostenible”.