Olimerca.-  A  pesar de que en muchas zonas olivareras de secano en la comunidad andaluza el cultivo no presenta su mejor aspecto debido a que las lluvias de la primavera no cayeron de manera equitativa y las olas de calor en verano han sido bastante dañinas, el primer aforo que acaba de presentar el Consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández-Pacheco, apunta a que se podrán conseguir un volumen de aceituna de 5.347.000 toneladas que con un rendimiento medio del 19% puede suponer una producción de aceite de oliva de 1.021.000 toneladas; mientras que a nivel nacional se pueden producir en torno a 1.276.000 ton

Estos datos significan que el sector aumentará la disponibilidad de aceite de oliva casi en un 50%, lo que sin duda es un respiro para el funcionamiento del mercado y el conjunto de los operadores. No obstante, hay que tener en cuenta que los stocks finales de la campaña 2023/24 serán los más bajos de la historia reciente y esto será una nueva carga de tensión porque el consumo tendrá un potencial de crecimiento superior a la oferta.

Por provincias, Jaén sería la provincia con un mayor aumento de cosecha al pasar de las 445.000 ton lo que significa un incremento con respecto a la campaña anterior del 116,1%. Le sigue la provincia de Córdoba con 271.000 toneladas, con un incremento del 78,7% y Sevilla con 125.000 toneladas, con un aumento del 24%

En cuanto al resto de provincias, Granada alcanzaría las 103.300 toneladas (aumenta un 83,8%), Málaga obtendría las 37.800 (21,9%), Huelva y Almería se quedaría en 9.000 ton y 7.400 ton (-41%) respectivamente y Cádiz en 22.500 toneladas (+105,4%)

Con estos datos, que podrían sufrir alguna modificación de aquí al final de la campaña si cambian las condiciones climatológicas y llegan las ansiadas lluvias, un año más el sector y el mercado en su conjunto tendrán que hacer equilibrios entre oferta y demanda para poder recuperar el consumo interior y las exportaciones sin demasiados sobresaltos.