Foto: DOP Oli de l'Empordà

Olimerca.- En pocas semanas, la Denominación de Origen Orotegida Oli de l'Empordà arrancará la campaña y sus previsiones son optimistas. Esperan un aumento de la producción y de la calidad del aceite respecto a la del año pasado.

Reconocen que la sequía ha complicado la cosecha de aceite durante los últimos años, siendo el 2020 la última con cifras normales, pero las lluvias de primavera en las comarcas de Girona hacen prever una recuperación. Para el presidente del consejo regulador de la DOP Oli de l'Empordà, Simón Casanovas, las lluvias han llegado en "un momento clave que ha ayudado a obtener una buena calidad del árbol, lo que debe llevar a una buena calidad del aceite de oliva virgen extra".

Asegura también que el año pasado fue una campaña "extremadamente seca" con una producción de 70.000 litros, y a falta de unas semanas para empezar la recolección, todo apunta a que la producción será superior a la del año pasado, pero inferior a las cifras de una cosecha normal.

En cuanto al precio, desde la DOP Oli de l'Empordà consideran que no subirá y que, como mínimo, "se podrá mantener respecto al de la cosecha anterior" o disminuir ligeramente.