Olimerca.- Las cooperativas de Castilla-La Mancha se muestran optimistas con la nueva campaña recien iniciada. Concretamente esperan un aumento de la cosecha de aceituna cercano al 25%, respecto a las 108.000 toneladas obtenidas la campaña anterior, gracias sobre todo a la pluviometría de este año, lo que supondría alcanzar las 135.000 toneladas de aceite de oliva.

Así lo han manifestado en la Asamblea Regional del Sector de Aceite de Oliva, celebrada en el Centro de interpretación Olivia de Malagón (Ciudad Real) con la asistencia de más de cuarenta representantes de cooperativas de las diferentes zonas productoras de la región, en la que se han abordado los principales temas de interés para el sector.

En este sentido el portavoz sectorial de Aceite, Gregorio Gómez, expreso la difícil situación que se había producido a lo largo de toda la campaña 2023/24 en Castilla la Mancha y en España, con una producción muy limitada por la sequía de la anterior campaña, pero con un mercado bastante dinámico y un nivel de salidas que han llevado a las existencias de enlace más bajas del último periodo, 186.000 toneladas frente a la media del periodo anterior que superaban las 474.000 toneladas.

Asimismo, ha hecho referencia a la nueva PAC, que ha traído consigo importantes cambios normativos que afectan a las prácticas culturales en el olivar y a las posibles ayudas a las que puede acceder.

“Todos los años estas ayudas sufren cambios que afectan a los socios de las cooperativas. Entre los aspectos más destacados de la PAC 2025 se encuentran cambios en la condicionalidad reforzada, este año flexibilizándose algunas las condiciones de cultivo en olivares en pendientes superiores al 10%; o cambios muy relevantes en los ecorregímenes, que pueden facilitar el acceso de manera más adaptada a las necesidades regionales de los eco regímenes específicos de cultivos leñosos”, ha señalado Gómez.