Olimerca.- A pesar de que durante el mes de agosto el mercado del aceite de oliva en origen se ha mantenido en un clima de gran firmeza en los precios, sostenido sobre todo por las cortas existencias, tanto en el lado de la producción como en el de la industria envasadora, las expectativas de cara a la segunda mitad del mes de septiembre no apuntan a que sea posible mantener esta estabilidad en la comercialización de los aceites.

Los factores que van a incidir en el posicionamiento de los precios en origen en España a partir del 15/20 de septiembre están muy claros: El inicio de la recolección temprana, sobre todo en los olivares intensivos y superintensivos y que son más fácilmente mecanizables y la consiguiente apertura de las almazaras en Portugal e incluso Túnez,  sin duda que favorecerán que los precios puedan empezar a ceder posiciones.

Conscientes de que la rebaja de los precios en origen está en puertas, en España ya son muchos los agricultores que están ya también negociando con sus almazaras y cooperativas la entrega de sus aceitunas para el mes de octubre y noviembre. Lo antes posible para que el precio del aceite no le afecte a las liquidaciones de sus aceitunas.

Saben que una aceituna de recolección temprana se valora a mejor precio y quieren aprovechar que todavía la cosecha no se ha generalizado para sacar ventaja competitiva.

Por categorías, la evolución de precios de los aceites lampantes es muy probable que se igualen o se acerquen en gran medida a los de los aceites virgen extra, dado que precisamente estos aceites para refinar son los que presentan más escasez y tardarán todavía tres meses en reponerse en las bodegas.

Ahora, otro de los problemas lo tienen aquellas almazaras o cooperativas que todavía no han superado la pérdida de los 9€/kg y confían en que todavía podría haber un repunte de los precios en origen y tienen todavía importantes partidas sin vender. Y es que nadie quiere quedarse con aceite viejo en la bodega, teniendo en ciernes los nuevos AOVE en breve. O venden sus existencias en 15 días o tendrán que vender sus aceites de la pasada campaña a precios más bajos de los actuales. 

Hay muchos productores a los que les duele más las pérdidas por no haber vendido en su tiempo y no son capaces de actuar pensando en las ganancias que pueden dejar de tener en el corto plazo.