Olimerca.- De locos. Así se puede calificar el actual mercado del aceite de oliva en origen. Lo que todo el mundo se negaba a admitir hace un año, es ya una terrorífica realidad. Nadie quería que el precio bajara de los cinco euros para que así toda la cadena de valor pudiera tener su justa remuneración, pero al final se ha impuesto la sinrazón y la locura colectiva y en esta segunda semana del mes de diciembre ya nos hemos encontrado ofertas de aceite de oliva virgen extra, también llamado “aceite del chorro” que se mueven en una horquilla que va desde los 3,80€/kg a los 4,2€/kg, 

El hecho de que todos los agricultores y todas las almazaras ya estén a pleno rendimiento en la recogida de la aceituna y la elaboración del aceite de oliva se ha traducido de manera inmediata en una avalancha de ofertas absolutamente desconcertantes.

A pesar de este comportamiento totalmente errático de la gran mayoría de productores, todavía se pueden encontrar operaciones de algunas almazaras, sobre todo para el mercado italiano, de exportaciones de graneles a 5,00€/kg y a 5,20€/kg.  Pero que no son suficientes como para frenar este mercado tan nervioso y descontrolado.

En este contexto, hay que mencionar la tensión que están viviendo las almazaras industriales que por una parte sufren la presión de los agricultores para liquidar la entrega de sus aceitunas y por otra intentan aguantar sus posiciones vendedoras para no seguir arrastrando los precios a un vacío sin sentido.

Así, están negociando con sus socios agricultores que el pago no se haga al contado, sino que se fije un margen de 15/20 días para cerrar el acuerdo, en base a la información proporcionada por el Sistema Poolred

Llegados a este punto, consideramos que mientras el conjunto del sector no sea capaz de tener una visión global de la producción y el comercio del aceite de oliva y que cada semana vaya sorteando la campaña a salto de mata, operando con la mirada puesta en que el precio puede seguir bajando en las próximas semanas, esta situación bajista no la remonta nadie. Nosotros mismos nos estamos cavando nuestra propia tumba.

Pueden consultar los precios AQUÍ.