Gonzalo Guillén, Dtor Gral de Acesur

Olimerca.- Los precios del aceite de oliva tocarán suelo, previsiblemente, durante la primavera de 2025. Así lo prevé el director general de Acesur, Gonzalo Guillén (en la imagen), quien ha avanzado que la caída del PVP del producto empezará a notarse a partir de finales de este año.

Según la información recogida por infoRETAIL, en una rueda de prensa celebrada en el marco del 39º Congreso de Gran Consumo de Aecoc, el directivo ha asegurado que la bajada en los precios del aceite empezará a notarse con el inicio de la producción a lo largo de estas semanas: “En noviembre y diciembre”, ha concretado. Sobre cuánto caerán los precios, el directivo ha querido ser prudente: “Es complicado saber dónde van a llegar, eso sí, no llegará a los niveles tan bajos de 2020 o 2021”. 

En paralelo, Guillén ha señalado que el sector parte “con un stock bajo mínimos”, quizá el más bajo de la serie histórica. “Estamos con el aceite justo para llenar el canal. Si sigue lloviendo de una forma razonable, seguramente para abril y mayo deberíamos ver el suelo de los precios, que puede estar en cuatro o cinco euros. Hoy estamos entre siete y ocho euros, dependiendo de las calidades”, ha apuntado. 

Gonzalo Guillén ha recordado que el mercado del aceite de oliva ha sufrido una inflación “galopante” en los últimos años, especialmente por la climatología. De hecho, las últimas dos cosechas han sido las peores de este siglo. “Además, nunca habíamos tenido dos cosechas malas seguidas”, ha remarcado. 

Está previsto que la nueva cosecha que acaba de arrancar se sitúe cerca de los 1,3 o 1,4 millones de toneladas, “lo que hará que los precios se regulen a la baja y bajemos un poco los precios del mercado”, ha asegurado Guillén, quien recuerda que en los últimos tres años (del 2020 al 2023), el aceite se ha encarecido un 300%. “Debemos volver a una normalidad”, ha afirmado el directivo, quien asegura que la principal caída del consumo de aceite se percibió cuando el litro superó los cinco euros.

“El consumo global de aceites ha descendido en torno al 5% en España. En Acesur no hemos sufrido tanto la caída, nos estamos manteniendo y hemos ganado cuota”, subraya el directivo.

En cuanto a la producción a nivel global, el responsable de Acesur señala que “todo pinta mejor”, a excepción de Italia y Marruecos. Tanto Túnez, como Grecia, Siria, Jordania o Portugal emergen con buenas producciones. “Si la producción media global era 3,1 millones de toneladas, este año se puede volver a los 3,2 millones. Deberíamos tender hacia la estabilidad”, asegura.

Facturación y margen
Por otro lado, Gonzalo Guillén ha señalado que el sector ha subido mucho en facturación porque el valor del aceite se ha disparado, pero no tanto en margen. “Ha habido una tensión entre el canal productor, la industria y la gran distribución porque la comunicación de subidas de precios era constante. Si miramos a nivel global estamos en una forma similar de margen. No hay grandes diferencias de margen neto, con independencia de facturación. Hemos sido capaces de defendernos”.

En cuanto a la situación de la compañía, Acesur venía de una media de facturación de entre 700 y 750 millones de euros antes de la inflación, mientras que el año pasado las ventas ascendieron a 1.100 millones. La previsión para este año ronda los 1.250 millones de euros.

No obstante, Gonzalo Guillen matiza que la compañía no se identifica tanto por el volumen de facturación, como por los litros: “Así es como buscamos la eficiencia”. En este sentido, el año pasado redujo un 20% el volumen en litros en comparación con 2022, mientras que en 2024 se encuentra al nivel de hace dos años: “Nos hemos recuperado bien”, concluye el directivo.