Olimerca.-  Ante una situación tensa en los mercados de fertilizantes, la Comisión Europea (la DG de Comercio) suspendido los aranceles convencionales para determinados fertilizantes, como son la urea y el amoníaco anhidro. 

Ante esta decisión el Copa y la Cogeca se congratulan y consideran que va en la dirección correcta. Además, piden a la Comisión que aplique este planteamiento en toda su extensión con la suspensión también de los derechos convencionales sobre los principales fertilizantes que utilizan los agricultores directamente (UAN, DAP, MAP y NPK) y las medidas antidumping sobre las importaciones de UAN (solución urea-nitrato de amonio) procedentes de Trinidad y Tobago y de los Estados Unidos. 

Los agricultores europeos consideran que esta medida podrá dinamizar esos mercados y hacer bajar los precios que pagan los agricultores a largo plazo.

A lo largo de 2021, los agricultores europeos experimentaron una subida sin precedentes de los precios de los fertilizantes nitrogenados debido al desequilibrio entre la oferta y la demanda en el mercado mundial de fertilizantes. La guerra  rusa en Ucrania ha generado más tensiones en esos mercados, ya que Rusia, Bielorrusia y Ucrania son los principales exportadores mundiales de fertilizantes minerales, y representan el 43% de las importaciones de fertilizantes minerales de la UE.

Como consecuencia, los agricultores europeos se enfrentan ahora al doble riesgo de que se disparen los precios de los fertilizantes minerales y de que haya escasez, lo que socavaría sobremanera no solo sus ingresos, sino también la producción de alimentos comunitaria y a la seguridad alimentaria mundial. A los miembros del Copa y de la Cogeca les preocupan las demoras que sufren desde ya en la nueva campaña de compra de fertilizantes.

El Copa y la Cogeca toman nota de la medida de la Comisión de suspender los aranceles convencionales para la urea y el amoníaco anhidro. Sin embargo, observan que en el ámbito de aplicación de la decisión de la Comisión no se incluyen los fertilizantes que los agricultores utilizan  directamente.  

Consdieran que este enfoque protege a los fabricantes europeos de fertilizantes, que además supone una ventaja para ellos, pero no representa una solución práctica para los agricultores.

Asimismo, han  pedido a la Comisión que suspenda las medidas antidumping sobre las importaciones de UAN procedentes de Trinidad y Tobago y de los Estados Unidos, así como los aranceles convencionales sobre los fertilizantes utilizados por los agricultores europeos, sobre todo porque la decisión europea llega poco después de una decisión estadounidense sobre el mismo asunto.

Por su parte, la Comisión de Comercio Internacional de los Estados Unidos reconoció el argumento de los cerealistas estadounidenses de que los aranceles conducen a un aumento de los precios de los fertilizantes y revocó el 18 de julio los derechos antidumping y antisubvenciones sobre los fertilizantes de nitrato de amonio de urea procedentes de Trinidad y Tobago, concluyendo que esas importaciones no perjudicaban a la industria estadounidense de fertilizantes.  

En este  contexto, los agricultores europeos se encuentran frente a una desventaja con respecto a sus homólogos estadounidenses. Por todas  estas  razones, consideran que "es esencial que la Comisión Europea tome cartas en el asunto sin dilación".