Olimerca.- La regulación del agua, la fotosíntesis o la síntesis de proteínas son algunas de las funciones vitales del olivar a las que contribuye el potasio. Y especialmente durante la fase productiva del árbol, cuando el hueso del fruto comienza a endurecerse, que es en la que se encuentra en estas fechas, las necesidades de este mineral aumentan.

Por ello, es fundamental que el olivo cuente, en este momento, con niveles suficientes de potasio, ya que es cuando está en el proceso de formación de azúcares, proteínas y grasas necesarias para el desarrollo de la aceituna, influyendo directamente en la producción.

Y es que gracias a un aporte adecuado de potasio se consigue una mejora de la calidad y el tamaño del fruto, y aumenta el contenido de aceite en la aceituna. Además, el potasio ayuda en la apertura y cierre de las estomas, lo que regula la resistencia del árbol al estrés hídrico, común en los meses de verano.