Olimerca.- El Consejo Oleícola Internacional (COI) avanza en su Proyecto de Balance de Carbono con una segunda sesión de trabajo celebrada los días 18 y 19 de febrero en cooperación con el Instituto del Olivo en el Instituto Nacional de Investigación Agrícola de Túnez (INRAT, por sus siglas en francés) en Túnez.

Esta iniciativa, lanzada en octubre de 2024 en colaboración con la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR), tiene como objetivo desarrollar un marco integral y herramientas para medir el balance de carbono de los olivares.

La reunión fue inaugurada por Hamed Daly Hassen, director general de la Oficina Nacional del Aceite de Oliva (ONH) de Túnez, quien expresó la expectativa del sector tunecino por la metodología de certificación de créditos de carbono.

Por su parte, Mondher Ben Salem, director general del INRAT, destacó la pertinencia del proyecto, señalando que se trata de una iniciativa crucial que requiere herramientas para comprender mejor cómo las prácticas agrícolas pueden reducir las emisiones y contribuir a la mitigación. Además, destacó que el cultivo del olivo es reconocido como un sumidero eficaz de CO₂.

El objetivo del proyecto es establecer una metodología que cuantifique el potencial de eliminación de carbono y el balance de carbono de un olivar, en consonancia con la normativa europea CRCF.

Este marco ayudará a los productores de olivares de todo el mundo a obtener una certificación voluntaria de créditos de carbono para sus olivares.

El objetivo del proyecto es establecer una metodología que cuantifique el potencial de eliminación de carbono y el balance de carbono de un olivar

Abderaouf Laajimi, director ejecutivo adjunto de Asuntos Operacionales del COI, destacó la importancia de esta iniciativa del COI y alentó la firma de un Memorando de Entendimiento con la Institución de Investigación y Educación Superior Agrícolas (IRESA) para crear un marco de colaboración duradero.

La profesora Zohra Lili Chabaane, presidenta de IRESA, expresó su plena disposición a formalizar el acuerdo, subrayando el compromiso de Túnez con las prácticas agrícolas sostenibles.

El Proyecto de Balance de Carbono del COI busca proporcionar a los productores de olivares herramientas prácticas para evaluar el balance de carbono de sus plantaciones y generar créditos voluntarios de carbono en el marco de los próximos mercados voluntarios de créditos de carbono.

Los olivares representan 11 millones de hectáreas de bosques que contribuyen a la salud del planeta. La producción de 1 litro de aceite de oliva elimina 10,65 kg de CO₂ de la atmósfera, mientras que los olivares capturan 4,58 toneladas de CO₂ por hectárea al año. En promedio, una hectárea de olivar compensa la huella de carbono anual de una persona. Al promover prácticas sostenibles, el proyecto pretende posicionar al sector oleícola como un contribuyente fundamental a la mitigación del cambio climático.