Olimerca.- Las ventas de aceite de oliva en Italia se están produciendo por debajo de su coste de producción, “ofendiendo la dignidad de los trabajadores, de las empresas y dificultado la cadena de suministro”. Así lo denuncia la Asociación Italiana de la Industria Oleícola, Assitol, que coincidiendo con el inicio de la campaña 2019/20 pide a las instituciones que intervengan en el esta situación “que devalúa la reputación del aceite de oliva, tratándolo como una mercancía de bajo precio”.

“Queremos romper esta espiral”, asegura Anna Cane, presidenta del grupo de aceite de oliva de la Asociación, y para ello “solicitamos una reunión con el ministro de Agricultura y Alimentación y Agricultura, para poner fin a la proliferación de ventas por debajo del coste".

La propuesta Assitol, ya presentada en junio pasado en Bruselas, en la reunión del Grupo de Diálogo Civil sobre el sector del aceite de oliva, pasa por establecer, por ley, la prohibición de realizar ventas por debajo del coste, imponiendo sanciones administrativas precisas.

Actualmente, la legislación italiana permite la comercialización de virgen extra a un precio más bajo que su coste una vez al año. Sin embargo, la realidad es bastante diferente, indica Assitol, “durante años, hemos sido testigos de este incumplimiento, especialmente en el comercio minorista a gran escala, sin tener en cuenta la estacionalidad y con una amplia discreción por parte de los grandes minoristas”.

Esta tendencia, añade la Asociación italiana, “ha degradado por completo la reputación del aceite de oliva virgen extra, haciendo que los consumidores crean que es un producto de escaso valor. "Al arrastrar los precios - enfatiza la presidenta del grupo de aceites de oliva – se ha extendido la idea de que el aceite de oliva es barato porque vale poco”.

Daño a toda la cadena de producción
Esta situación “invita al consumidor a buscar el precio más bajo, siendo el único criterio para elegir el virgen extra". Este daño a la reputación del AOVE repercute en toda la cadena de producción, y en los ingresos de todos los agentes involucrados, observa Anna Cane.

Así, “a pesar del compromiso común de ofrecer al consumidor un producto de calidad, seguro y saludable, ninguno de los operadores involucrados, desde los productores de oliva hasta las empresas de envasado, recibe una remuneración adecuada".

Esta presión a la baja de los precios hace que sea cada vez menos rentable cultivar aceitunas, producir aceite y envasarlo, por lo que tomar medidas para detener la situación es esencial para Assitol.